¿Por qué el color del pacharán es rosado si las endrinas son negras?


Esta es una pregunta muy buena. Efectivamente si comparamos un arañón con un grano de uva tinta veremos que el color de la piel de ambos es muy similar: negro en ambos casos, además las dos tienen la piel cubierta de una cera azulada.
Entonces, ¿porque no obtenemos pacharanes tintos? Para encontrar la razón vamos a observar con más atención la piel del arañón. Arrancamos con las uñas un trozo de piel y, al tirar de ella, vemos que sale fácilmente una tira larga. La observamos al trasluz y vemos que no es negra: en realidad se ve morada.
Ahora la llevamos a la boca y la mordemos con los dientes. Comprobamos que cruje muy poco, es bastante fina. Sobre todo si la comparamos con la piel de la uva... podemos hacerlo de memoria porque todos hemos comido las uvas en las campanadas de nochevieja y todos nos hemos atragantado con sus pieles. Y si tenemos en cuenta que las pieles de las uvas tintas son todavía más gruesas ya hemos adivinado la causa de esta falta de color en el pacharán: la piel del arañón es mucho más fina y, por tanto, contiene menos materias colorantes que las uvas.
Por eso el color del pacharán termina siendo rosado en lugar de tinto. Y esto será igual independientemente de la cantidad de endrinas que añadamos ya que es imposible sacar más color del que hay.