Visitando
a nuestros amigos endrinos en junio comprobamos que continúa el crecimiento de
las endrinas: ya sólo quedan en el árbol los frutos sanos y van adquiriendo poco
a poco tamaño en su profundo color verde. Aun estando perfectamente
mimetizados con el verde de las hojas resulta fácil distinguirlos; sin embargo son las hojas lo que hoy llama nuestra atención.
Porque entre las hojas que brotan con su tierno y atractivo aspecto encontramos algunas que
no crecen como debieran y parecen doblarse sobre sí mismas al poco de brotar de
la yema, como recogiéndose sobre su vientre por un intenso dolor. Porque dolor
es lo que transmite la vista de estas hojas, el dolor causado por una
enfermedad.
¿Pero
cómo, al endrino le afectan las enfermedades? podemos preguntarnos, sorprendidos.
Porque vemos siempre al endrino como un árbol rústico, silvestre, y por ello
robusto y resistente. Y sí, el endrino es robusto, pero al igual que está a
merced del ganado que aprovecha su abandono en el campo para comer sus brotes tiernos también está indefenso ante
otros bichos mucho más pequeños pero que también aprecian las tiernas hojas que
del endrino van brotando.
Si
desplegamos una de estas hojas encontramos el culpable de este visible dolor:
un pequeño pulgón, verde y casi invisible, que aprovecha la blandura de la piel
de la pequeña hoja para hacer una incisión en su parte interior y chupar su
savia.
Podríamos apreciar algo mejor al pulgón con el aumento, mejor todavía un una foto de detalle obtenida
de internet.
Aunque el aumento deja algo borroso al pulgón nos permite apreciar unas partículas de color blanco que son el
azúcar que los pulgones van dejando como residuo de la digestión. Porque podemos decir que
estas pequeñas criaturas cagan azúcar… aunque en realidad es un líquido dulce
que se denomina ligamaza.
Esta
curiosidad no es banal puesto que es la causa de uno de los ejemplos de
simbiosis más curiosos que podemos encontrar en la naturaleza. Y es que hay
otro insecto que se aprovecha de este azúcar que segrega el pulgón: las
hormigas han encontrado en ellos un proveedor de alimento y los cuidan y
protegen para consumirlo. Por eso es fácil ver en árboles y plantas atacadas
por los pulgones una gran presencia de hormigas que suben a recolectar la dulce
secreción de los pulgones. Podemos verlas incluso como pastores de un “rebaño”
de pulgones de los que recolectan el azúcar directamente de su cuerpo dándoles
unos golpes con sus patas delanteras.
A cambio de su alimento las hormigas
protegen a los pulgones de sus predadores, las mariquitas por ejemplo, e
incluso los trasladan de una hoja que han dejado seca de tanto sorber su savia
a otra fresca en la que puedan continuar “pastando”. Sorprendente, sin duda, el
detalle que se aprecia en este vídeo.
Como vemos a los pulgones indefensos ante el tamaño de la mariquita resulta fácil ver en ella un
predador agresivo y detestable. Sin embargo en realidad son las mariquitas las auténticas amigas de los
endrinos ya que los libran de los dañinos pulgones y permiten a sus hojas desplegarse verdes
y brillantes.
Pero como hace ya tiempo que los endrinos encontraron quién los cuide ya no dependen de las mariquitas para no sufrir el daño de los pulgones: es muy fácil eliminarlos pulverizando agua con un producto que los mate. Podemos comprar el producto o bien elaborarlo de una forma natural macerando tabaco en agua: deshacemos un puro en una botella de un litro con agua y lo dejamos macerar durante 24 horas a oscuras. El agua disuelve la nicotina y, si la pulverizamos en las hojas de los endrinos (o en las plantas de las macetas del balcón, o en la huerta) es veneno suficiente para acabar con estos diminutos insectos. Hay que tener en cuenta que la nicotina se desactiva con la luz del sol en 24 horas, por eso tenemos que mantener el macerado a oscuras pero también nos da la seguridad de que no quedará ningún residuo en las endrinas (ni en los tomates de la huerta, por ejemplo). En fin, ya sabes qué hacer con los puros que tienes guardados como recuerdo de las últimas bodas: reciclarlos en tratamiento ecológico para tus plantas.
Y nos despedimos de los endrinos este mes en que se acaba la
primavera y da comienzo el verano. También el endrino parece despedirse de la
primavera abriendo algunas flores tardías que lucen sorprendentes acompañando a
las pequeñas endrinas.